La ciudad de Puerto Madryn, a 1400 kilómetros de Buenos Aires, posee playas sobre Mar Argentino – Océano Atlántico. A pocos kilómetros de la ciudad, la Península de Valdés es el lugar donde cada año, entre los meses de Junio y Noviembre, llega la Ballena Franca Austral para completar el período de gestación en las mansas aguas de la bahía. Asimismo, la Reserva Punta Tombo, hacia el Sur, recibe entre los meses de Septiembre y Marzo gran cantidad de pingüinos magallánicos, que forman allí una numerosa colonia.
La Península Valdés fue declarada Patrimonio Mundial de la Humanidad por la Unesco, en el año 1999. La observación de la fauna marina y el estudio y cuidado de la naturaleza, han convertido a Puerto Madryn en una de las ciudades balnearias y turísticas más importantes de la Patagonia.
Observaciones: La temporada ideal para visitar Puerto Madryn son los meses de Septiembre (a partir del 15) y fines de Noviembre, donde se pueden completar las dos excursiones, Península de Valdés y Punta Tombo, observando ballenas y pingüinos.
Incluido en el precio
· Ticket Aéreo
· 3 Noches de Hotel en Categoría 3* – 4* – 5* con desayuno.
· Guía Turístico
· Traslados de llegada y salida en destino.
· Excursión de Día Completo Península de Valdés.
· Excursión de Día Completo Punta Tombo.
El precio no incluye
· Tasa de ingreso a las reservas naturales de Península de Valdés y Punta Tombo.
· Tasa de ingreso a museos.
· Navegación en Puerto Pirámides.
· Comidas y gastos adicionales del cliente.
Lugares de Interés
· Museo Provincial Oceanográfico y de Ciencias Naturales.
· Ecocentro.
· Playa El Doradillo.
Itinerario
Día 1: Pasaje aéreo – Tiempo de viaje: 2:00 horas.
Traslado Aeropuerto – Hotel. Alojamiento con desayuno.
Día 2: Excursión Península de Valdés
La Reserva Península de Valdés se encuentra a 77 kilómetros de la ciudad de Puerto Madryn. Se accede por la Ruta Provincial N° 2, llegando al Istmo “Carlos Ameghino” que conecta a la península con el continente, y donde el agua flanquea los dos costados del camino. Tanto a la derecha como a la izquierda se puede ver el océano. De un lado, el Golfo Nuevo, y sobre el otro el Golfo San José. Muy cerca se encuentra la Isla de los Pájaros. En ese punto se accede a la Reserva Integral de la Península Valdés y al Centro de Interpretación Florentino Ameghino y el Museo Regional Fuerte San José, con importante información sobre los lugares a visitar y su geografía, flora, fauna e historia. Luego de 25 kilómetros de recorrido observando la Estepa Patagónica, comienza a divisarse el turquesa del mar detrás de los acantilados. Estas hermosas vistas corresponden a Puerto Pirámides, el único asentamiento poblacional de la reserva. Desde allí parten las embarcaciones para realizar el avistaje de la Ballena Franca Austral entre los meses de Junio y Diciembre. La Ballena Franca Austral llega a las aguas del golfo para procrear y dar a luz a sus crías. Es un cetáceo de la clase de los mamíferos y fue declarado Monumento Natural por una ley nacional del gobierno argentino. Los científicos identifican ejemplares desde 1970 mediante fotos aéreas. Se calcula que hay por lo menos 700 animales individualizados. Se sabe así que las poblaciones del hemisferio norte y el hemisferio sur no se mezclan. La ballena franca, al igual que otros grandes cetáceos, tiene la costumbre de realizar espectaculares saltos sobre la superficie del mar.
Las navegaciones se realizan en embarcaciones de diversas capacidades, desde 5 hasta a 70 pasajeros, y duran aproximadamente 1:30 hs. Los capitanes de las embarcaciones siempre procuran llegar a tener contacto con ellas a distancia prudencial, es por ello que algunas veces se extiende la navegación para intentar divisarlas. En la Reserva, las ballenas viven en total libertad, por lo que puede ocurrir que haya días en los que no se las pueda avistar desde la embarcación y otros en los que se las divise desde la costa. En Puerto Pirámides se puede almorzar, realizar caminatas por sus playas y durante los meses de verano bañarse en sus aguas.
Desde Puerto Pirámides se accede a Punta Delgada, en el extremo sur de la península. Allí se puede observar una Colonia de Elefantes Marinos. En este sector habitan más de un centenar de elefantes marinos, con la particularidad de concentrar la mayor población de hembras con crías en primavera.
Caleta Valdés: Se encuentra a 77 kilómetros de Puerto Pirámides. Es la reserva protegida más reciente de la costa chubutense y constituye un accidente geográfico que, por su particular entorno, concentra una variada biodiversidad de fauna. La caleta es una albúfera formada por una barra sólida de 30 Kilómetros que se extiende de Norte a Sur. Allí, las condiciones ambientales son propicias para el desarrollo de una gran población de mamíferos marinos, aves marinas y costeras y algunas especies típicas de la estepa patagónica.
Punta Norte: En esta zona, en verano, pueden verse Lobos y Elefantes Marinos. Con marea alta, es posible avistar Orcas.
Al atardecer se regresa a la ciudad de Puerto Madryn.
Día 3: Excursión Punta Tombo
Traslado desde los hoteles a partir de las 8:30 horas.
Desde Puerto Madryn son 181 kilómetros hacia el Sur hasta la Reserva Punta Tombo, la mayor Colonia Continental de Pingüinos de Magallanes. Allí es posible caminar prácticamente entre pingüinos y conocer su modo de vida en su hábitat natural, en una caminata de hasta 2 horas. El contacto con los pingüinos es muy cercano y resulta simpático descubrir cuan amigables son, siempre que no sean molestados. Se prohíbe tocarlos, ya que el contacto con el humano les imprime un olor diferente en su piel y pueden llegar a ser excluidos por sus pares.
La temporada se extiende de Septiembre a fines de marzo, época en la que las aves llegan a la costa para nidificar y cuidar a sus crías.
Punta Tombo es una estrecha franja pedregosa de 3 km de largo por 600 m de ancho que se adentra en el Océano Atlántico. Hay zonas que están literalmente “minadas” de cuevas de poca profundidad, donde los pingüinos año a año ponen sus huevos y crían a los pichones. La pendiente suave de estas playas, facilita así mismo el desplazamiento terrestre de las aves, que varias veces al día efectúan el trayecto entre los nidos y el mar para alimentarse. Los pingüinos no se asustan ni abandonan sus nidos ante nuestra visita, por lo que la interacción es muy directa. Para evitar accidentes y perjuicios a los animales, desde la conformación de la reserva se han construido pasarelas que permiten circular a los visitantes sin peligro de derrumbar a su paso las cuevas. El pingüino de Magallanes es bicolor: negro y blanco. Con algunas variaciones según la temporada, se ha contabilizado en Punta Tombo la presencia de más de 1.000.000 de ejemplares de pingüinos de Magallanes, lo que la convierte en la mayor pingüinera continental de esta especie. Otras especies de aves que nidifican el lugar, incluyen a la gaviota cocinera, la gaviota gris o austral, los skúa , el cormorán Real y el cormorán de cuello negro, patos vapor, y ostreros. La reserva es visitada así mismo por palomas antárticas, petreles y gaviotines. La población es muy frágil y se ha reducido un 20 %. Sus mayores amenazas son el cambio climático, el turismo, las redes de captura de camarones y los derrames de petróleo.
Al finalizar la caminata, se da tiempo libre al visitante para almorzar.
Regresa la ciudad de Puerto Madryn.
Día 4: Regreso a su ciudad de destino.
Traslado desde el hotel al aeropuerto. Aéreo.
